La Eurocopa es noticia por lo que se ve en los terrenos de juego, pero también por lo que sucede en el exterior de los estadios. En este torneo se están viendo numerosas peleas en las calles francesas entre hinchas de los diferentes países y gran parte de ellas comienzan por culpa del alcohol.
Luego están las historias increíbles por culpa del licor. La última ha tenido lugar en Niza después de que un aficionado inglés cogiera tal borrachera que se confundiera de apartamento.
Este aficionado inglés de 25 años tuvo la mala suerte de intentar entrar por la fuerza en la casa de un policía francés, que no dudó en rociarle con gas pimienta para calmarle. Al parecer, Robertson estuvo todo el día bebiendo con unos amigos en la playa y cuando volvió al centro de Niza quiso buscar su apartamento alquilado por Airbnb, pero su desorientación hizo que se confundiera de apartamento. Como nadie le abría usó un extintor para hacer más ruido y fue en ese momento cuando se topó con el agente francés.
Robertson fue detenido y pasó tres días en la cárcel hasta ser juzgado por daños materiales y allanamiento de morada. En su defensa dijo que había bebido tanto que sufría amnesia. “He tenido tiempo para recapacitar y pensar en lo que hice”, dijo mientras lloraba. “He pasado miedo y nunca más beberé”.
Al parecer Robertson había consumido tres cuartas partes de una botella de vodka, una botella de vino y cerveza. El juez no le condenó finalmente, pero le pidió que no saliera "a celebrar el levantamiento de la condena".
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