El partido entre el Atlético Grau de Piura y el Sport Chorrillos de Querecotillo, de la Copa Perú, fue suspendido a doce minutos de su conclusión entre los disparos al aire de policías que intentaban contener una batalla campal entre jugadores y aficionados por un gol anulado.
La violencia comenzó a desatarse cuando uno de los miembros del cuerpo técnico visitante invadió el terreno de juego para increpar al árbitro por un gol anulado a su equipo, según informaron medios locales.
Seguidamente ingresaron a la cancha aficionados del Sport Chorrillos para reclamar la legalidad del gol y agredir al árbitro y a los jugadores del Atlético Grau, lo que propició que uno de los futbolistas resultara herido por el impacto de una botella en su cabeza.
El gol anulado impedía al Sport Chorrillos reducir la desventaja de 2-0 que tenía en ese momento del partido.
El Atlético Grau anotó por intermedio de Kevin Alcalde y Richard Ontaneda.
El duelo correspondía a la tercera fase de la Copa Perú, torneo cuyo campeón nacional obtiene el ascenso a la primera división y en el que son habituales los episodios de violencia entre jugadores e hinchadas rivales.
A la Copa Perú también se le conoce con el apelativo del "fútbol macho", por su dureza y dificultad para ganarlo, ya que compiten equipos de todos los municipios del país en canchas con condiciones muy limitadas.
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