El agente I. A. de la Ertzaintza ha fallecido esta noche tras sufrir una parada cardiaca tras los altercados previos al partido entre el Athletic y el Spartak. El agente, perteneciente a la 12º promoción, ha sido trasladado al hospital de Basurto, donde tras ser reanimado momentáneamente ha fallecido. En dichos incidentes se han registrado al menos cinco arrestos, tres de ellos rusos. Otras dos personas han resultado heridas.
La situación ha estallado cuando un seguidor ruso ha arrojado un vaso a la zona donde se hallaban los aficionados del Athletic de Bilbao. A partir de ese momento se han sucedido el lanzamiento de diversos objetos y las cargas de la Ertzaintza.
Los hinchas rusos que se han desplazado hasta Bilbao han mantenido alerta la ciudad y no ha sido hasta minutos antes de entrar en el estadio cuando se han producido los primeros incidentes. En las inmediaciones de San Mamés se han vivido momentos de tensión y la Ertzaintza ha tenido que intervenir. Peleas, lanzamientos de objetos, que han terminado con las Ertzaintza cargando contra varias personas que participaban en la trifulca.
Hasta unos minutos antes de llegar a San Mamés la jornada se estaba desarrollando sin incidentes. Los 200 aficionados rusos se han reunido en Moyua, pero no todos han decidido acudir al encuentro. Allí han estado acompañados por la Ertzaintza hasta que se han dirigido al campo. Lo han hecho de forma pacífica, entonando cánticos en apoyo l Spartak y ondeando banderas con los colores de su equipo.
El dispositivo de la Ertzaintza establecido para el partido que a las nueve de esta noche enfrentará al Athletic Club con el Spartak de Moscú en San Mamés, encuentro que ha sido catalogado "de alto riesgo", está coordinado con la Policía Municipal de Bilbao y la seguridad privada que dispone el Athletic en San Mamés. Éste incluye 500 ertzainas, 100 policías municipales y 200 agentes de seguridad privada contratados por el club de fútbol.
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