Los temidos incidentes por la llegada de hinchas ultras del Spartak de Moscú para asistir al partido de Europa League que su equipo disputa este jueves contra el Athletic han comenzado antes de lo esperado, y lo han hecho en Vitoria y no en Bilbao, como parecía más previsible. Anoche, cuando todavía faltaban 72 horas para el encuentro, la calle Cuchillería de la capital alavesa se convirtió en una olla a presión, después de que aficionados radicales alojados en la ciudad protagonizaran un incidente con el dependiente de una tienda de seguidores del Deportivo Alavés. El fuerte despliegue policial posterior evitó males mayores en esta calle del Casco Viejo.
El altercado con los violentos hinchas rusos, que tienen en guardia a la Ertzaintza sobre todo en Bilbao pero desde anoche también en Vitoria, se originó hacia las siete y media de la tarde. En un primer momento, la Policía Local recibió una llamada telefónica en la que se alertaba de una «pelea» en la calle. El comunicante informó de que podía tratarse de un grupo de rusos, lo que en un principio sorprendió a los efectivos policiales, toda vez que el partido contra el Athletic en San Mamés no se disputará hasta el jueves.
Puntos de sutura
Al llegar al lugar señalado, los agentes encontraron a un joven vitoriano con lesiones en la cara, sobre todo a la altura de un ojo. No quiso denunciar y optó por marcharse a Urgencias. Allí le tuvieron que dar varios puntos de sutura, según algunas fuentes. El incidente pudo originarse después de que los hinchas rusos pusieran unas pegatinas sobre otras del Alavés en el exterior del local. Cuando el empleado les llamó la atención, estos presuntamente le atacaron.
Sobre las 21.30 horas, la Policía Local recibió una nueva alerta. Medio centenar de encapuchados comenzaban a concentrarse cerca del lugar de los hechos con la aparente intención de localizar a los agresores. Las alarmas saltaron en los cuerpos policiales para evitar una batalla campal. Todo el turno disponible de la Policía Local se desplegó en la zona, cortando la calle Cuchillería a la altura del cantón de San Marcos. La línea de agentes impidió que los encapuchados se acercaran al establecimiento donde se supone que se alojan los ultras rusos. Estos, al final, optaron por marcharse. Hoy y mañana «podría haber nuevos incidentes» con la llegada de nuevos hinchas, temen en voz alta medios policiales.
El Spartak de Moscú es un club tristemente conocido por la virulencia con que se emplea una parte de su afición de ideología de ultraderecha. De hecho, el partido contra el Athletic está declarado de alto riesgo por los antecedentes de este grupo y porque el número de seguidores que se espera asciende a unos 2.000. La Policía sigue en guardia en Vitoria, dado que intuyen que «unos 250» aficionados podrían haber reservado habitaciones en hostales o albergues de la ciudad. También se les ha detectado en otras localidades próximas a Bilbao.
Ocurrió a primera hora de la noche del lunes 19 de febrero. La Policía Municipal y la Ertzaintza realizaron un gran despliegue de efectivos para atender una llamada por una pelea ocurrida en el centro de Vitoria.
Informan medios locales de que se desencadenó una pelea entre hinchas del Spartak y aficionados de la peña del Alavés Iraultza, que terminó con al menos una persona herida. Los hechos ocurrieron a las puertas de la tienda de esta agrupación.
Al parecer, la pelea se desencadenó por las provocaciones de los ultras rusos, que según una versión recogida por la prensa vitoriana, irritó a los jóvenes alavesistas tapando un escudo de su club con una pegatina del Spartak.
Otras versiones hablan de una simple provocación por parte de los rusos, cuatro nada más, que desencadenó en la pelea.
Aunque el partido se juegue en Bilbao, la falta de habitaciones ha llevado a muchos rusos a reservar en localidades relativamente próximas a la capital vizcaína como Vitoria. Los cuatro protagonistas de este incidente al parecer se alojarán toda la semana en un céntrico hostal.
La pelea provocó el despliegue de la práctica totalidad de las unidades móviles disponibles de Policía Local y Ertzaintza. Se colocó un dispositivo de vigilancia en torno al hostal para evitar que los incidentes se repitieran.
Se espera que el número de aficionados rusos aumente conforme se acerque la fecha del partido, y Vitoria se prepara para albergar a estos impredecibles hinchas.
Ocurrió a primera hora de la noche del lunes 19 de febrero. La Policía Municipal y la Ertzaintza realizaron un gran despliegue de efectivos para atender una llamada por una pelea ocurrida en el centro de Vitoria.
Informan medios locales de que se desencadenó una pelea entre hinchas del Spartak y aficionados de la peña del Alavés Iraultza, que terminó con al menos una persona herida. Los hechos ocurrieron a las puertas de la tienda de esta agrupación.
Al parecer, la pelea se desencadenó por las provocaciones de los ultras rusos, que según una versión recogida por la prensa vitoriana, irritó a los jóvenes alavesistas tapando un escudo de su club con una pegatina del Spartak.
Otras versiones hablan de una simple provocación por parte de los rusos, cuatro nada más, que desencadenó en la pelea.
Aunque el partido se juegue en Bilbao, la falta de habitaciones ha llevado a muchos rusos a reservar en localidades relativamente próximas a la capital vizcaína como Vitoria. Los cuatro protagonistas de este incidente al parecer se alojarán toda la semana en un céntrico hostal.
La pelea provocó el despliegue de la práctica totalidad de las unidades móviles disponibles de Policía Local y Ertzaintza. Se colocó un dispositivo de vigilancia en torno al hostal para evitar que los incidentes se repitieran.
Se espera que el número de aficionados rusos aumente conforme se acerque la fecha del partido, y Vitoria se prepara para albergar a estos impredecibles hinchas.
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